miércoles, 27 de agosto de 2008


Si creés que podés: podés… Tu mente es tu verdadero yo: tu verdadero ser. Hay millones de posibilidades en la naturaleza, en los elementos, en el ser humano y fuera de él, y aparecen cuando el hombre mira y aprende a usar esta fuerza de la naturaleza y de sí mismo. Posibilidades y milagro significan lo mismo. Los sueños de cada uno de nosotros, son las luces que se prenden: jamás renuncies a tus sueños… ni los dejes atrás. Hacelos tuyos y a lo largo de toda tu vida guardalos como tesoros, sin dejarlos escapar jamás: el mundo será así un lugar mejor para vivir.

El núcleo del amor es la fuerza, el valor que mostramos para luchar por lo que amamos, la fortaleza para defender lo que más apreciamos, enfrentar desafíos, superar barreras, derribar obstáculos.
Cuando el amor es auténtico surge con la fuerza de la audacia, el atrevimiento, la osadía que nos lanza a correr riesgos para conquistar lo que amamos; es en esa entrega sin condiciones donde surgen fortalezas donde antes no las había.
El amor nos transforma en seres superiores, nos despierta nuestra capacidad de asombro, nos da la sensibilidad de la contemplación, nos impulsa a niveles infinitos, nos da la fuerza para recorrer nuestra vida con un espíritu invencible y nos impulsa a alcanzar lo imposible.El amor es la fuerza que Dios deposita en el corazón de todos los seres humanos, a cada uno corresponde decidir vivir como un paladín o un cobarde, como un conquistador o un conformista, como un ser excelente o un mediocre, como un ser lleno de luz o quien permanece por siempre en la oscuridad, el amor hace nacer la fuerza para atrevernos a ser auténticos colaboradores en la grandeza de la creación.

De què me sirviò amarlo, de què me sirviò esperarlo, de que sirven ahora las làgrimas derramadas, si todo mi mundo se desvaneciò en tan solo un minuto ? se llevò mi vida sin pensar, dejandome a medio camino sola, desprotegida, necesitandolo, llamandolo a gritos, sola en medio del camino me quedo sin que nadie pueda escuchar mi llanto, preguntando al aire el por què de esta angustia, maldiciendo cada làgrima, arrepintiendome de segundo a segundo el haber creido en un amor que jamàs fuè mio. Lo triste es que yo creì en ese amor, ese amor que hoy me deja sumida en la mayor tristeza de la vida, en medio del camino me quedarè, se detendrà mi corazòn y ahì quedarà escondido cada sentimiento de amor, porque hoy termina el tiempo para amar-

Somos los caídos a los que nadie importa ni escucha pero nosotros tambien sentimos,sangramos y sentimos dolor...no tenemos la culpa de ser asi quizas nunca pudimos elegir,yacemos en un rincon oscuro con pocas oportunidades y esperanzas..sentimos frío por la cruda indeferancia..muy pocos logran pasar la barrera de la sociedad..queremos ser comprendidos y escuchados pero la represion es demasiado fuerte...solo permanecemos en este oscuro lugar esperando hasta exalar el ultimo aliento e ir a un algun lugar mejor que este frío infierno.

Durante algún tiempo sus vidas fueron de alegría, dicha y felicidad....los atardeceres se vestían con sus mejores galas para recibir a dos enamorados que tanto y tanto tiempo se habían esperado, el sol bañaba con su pureza ese amor que sentían los dos mutuamente. El destino quiso que aquella alegre y simpatica dama conociera al hombre de sus sueños, y él sentía como el amor llamaba a su puerta y no se resistía a ello porque la amaba como nunca antes lo había echo.